PERÚ - OLLANTAYTAMBO Y NUESTRA VIDA EN EL

Tras dos meses de viaje ya tocaba hacer una parada y tener otro tipo de experiencia, así que contactamos con el alojamiento mediante la página work away y allí nos presentamos (tras aquel anecdótico viaje).

Como algunos ya sabéis, este tipo de trabajo, intercambia alojamiento y comidas a cambio de trabajo. Un trabajo en nuestro caso muy relajado, dando clases de inglés a niños, limpieza de habitaciones, recepción y tareas varias en el hostal.

La familia que lo regenta nos hizo desde el primer momento sentirnos como uno más, compartiendo con ellos cada comida, excursión o cuestiones diarias del dia a día.

Gracias a Hoovert pudimos visitar comunidades altoandinas o sitios arqueológicos incas como pumamarca, alejados del pueblo de Ollantaytambo.

¿Cómo es Ollantaytambo? Pues es un pequeño pueblo camino a Machupicchu, por lo que siempre se mantiene vivo de turistas, pero guardando la esencia del lugar, sus pequeños comercios y artesanos por las calles vendiendo día a día lo que producen.

Unos cuantos post atrás os dije que iba a hablaros un poco sobre la trilogía inca. Pues bien, Ollantaytambo, pueblo perteneciente al Valle sagrado nos permite ver en muchas de sus infraestructuras o decoraciones tales elementos.

En la cultura Inca hay tres animales sagrados: la serpiente, el puma y el Cóndor.
La serpiente (amaru) representa a la lucha por sobrevivir; estamos amarrados al Mundo de Abajo, el Ukhu Pacha. Cuando somos Puma, podemos mirar mas allá, tenemos el dominio de la fuerza, la inteligencia y la astucia necesaria para poder atravesar el Kay Pacha ( El Mundo de aquí y ahora). En el momento que logramos elevarnos para ser Cóndor, se nos abren las puertas del Hanan Pacha ( el Mundo de Arriba).

Esta cultura está llena de rituales y ofrendas a la Pachamama (madre tierra).
Nosotros tuvimos la suerte de realizar una cuando nos dirigimos al sitio arqueológico de Pumamarca.
Juntando tres hojas de coca y formando una especie de trébol te diriges a las distintas montañas que divisas desde el lugar en el que te encuentras: apu pinkuyuna, apu yanaorjo, apu veronica y apu pumamarca. Tras realizar un soplido hacia las hojas tras su nombramiento, escondes tus tres hojas bajo un roca bajo tierra. Así realizas la ofrenda a la madre tierra, rituales de origen ancestral que son parte de un sistema de reciprocidad entre el mundo material y el mundo espiritual.
Su finalidad es devolver a la Madre Tierra lo que te ha dado y por nuestros deseos, lo que queremos lograr en nuestra vida y lo que queremos para nuestra gente.

¿ Os acordáis de nuestros amigos argentinos? La familia se hospedó en el hotel donde trabajamos y pudimos compartir de nuevo charlas cenas y unas cuantas cervezas. Fue una alegría tenerlos de nuevo por aquí. Pena cuando se fueron, pero habrá otro tercer reencuentro.

No es la única visita que hemos recibido, ya que Denise, la chica brasileña con la que compartimos varios días en Chile, también llegó aquí. Una gran deseada llegada ya que con ella nos dirigiriamos a visitar el Machupicchu en nuestros días libres. En el siguiente post os contaremos la experiencia.



Un abrazo a todos.